6 hombres y dos adolescentes fueron
asesinados entre el 26 de julio y ayer, en el contexto de la represión
del Estado contra las manifestaciones convocadas por la oposición. Así
se desprende del registro del Ministerio Público, que hasta el cierre de
esta edición no incluía todavía la muerte de un teniente coronel
retirado de la GNB asesinado en Táchira cuando protestaba contra la
constituyente.
Todas las víctimas de las últimas 72
horas recibieron impactos de bala. El estado con más fallecidos en ese
lapso fue Mérida, con tres muertes, incluyendo la de un Polimérida. Las
otras 6 personas fueron asesinadas en Miranda, Caracas, Carabobo,
Anzoátegui, Lara y Táchira.
En total, 113 venezolanos han sido
registrados por el Ministerio Público como víctimas de la represión
desde el 1 de abril, cuando comenzaron las protestas contra el golpe de
Estado del TSJ y para exigir elecciones libres, hasta ayer (119 días).
Entretanto, 241 personas fueron
detenidas por participar en el paro cívico con trancazo de 48 horas que
realizó la Mesa de la Unidad y sectores sindicales esta semana.
Alfredo Romero, director del Foro
Penal, reportó 192 detenidos el miércoles y 49 el jueves en 14 estados
del país: Apure, Aragua, Barinas, Bolívar, Carabobo, Caracas, Falcón,
Lara, Mérida, Miranda, Portuguesa, Sucre, Táchira y Zulia. Solo en éste
último las fuerzas policiales detuvieron a 127 manifestantes.
Romero indicó en su cuenta Twitter
que la cifra global de detenciones desde el primero de abril se elevó a
4.848, de los cuales 1.348 siguen detenidos y 527 han sido presentados
ante tribunales militares contrariando la Constitución y la Ley, que
establecen que los civiles solo pueden ser juzgados en tribunales
civiles. La cifra de presos políticos según el Foro Penal se ubicó en
498.
Los casos
El miércoles, durante las primeras 24
horas del paro cívico y huelga general, fueron asesinados 3 personas.
Rafael Balza Vergara, de 30 años de edad, fue perseguido por efectivos
de la GNB quienes le dispararon a quemarropa en el pecho, en Ejido,
Mérida; Enderson Caldera Ramírez, de 23 años de edad, muerto de un
disparo en una protesta en Timotes, Mérida; y Jean Carlos Aponte, de 16
años de edad, recibió un disparo en el tórax cuando protestaba en el
distribuidor 5 de Julio, en Petare, Miranda.
El jueves fallecieron otros 4
venezolanos. Glimber Terán Villalobos, de 16 años de edad, había sido
herido la víspera, de un tiro en la cabeza, cuando civiles armados
dispararon a un grupo de manifestantes en El Paraíso; Leonardo González
Barreto, de 48 años de edad, recibió un disparo en la espalda cuando
pasaba en su carro por una manifestación en Naguanagua, Carabobo, que
era reprimida por Policarabobo; Rafael Caniche, de 29 años de edad,
murió de un disparo durante una protesta en El Jabillote, Anzoátegui; y
José Pestano Canelón, de 23 años, fue asesinado de un disparo en el
tórax en una manifestación en Cabudare, Lara.
Ayer, el Ministerio Público reportó
otra víctima. Se trató del oficial jefe de Polimérida Oneiver Quiñones
Ramírez, de 30 años de edad que recibió un disparo en la cabeza cuando
despejaba escombros en una avenida de Ejido, Mérida.
Asesinan a GNB retirado que protestaba contra ANC
Ayer a mediodía falleció Eduardo Gil
Rodríguez, de 53 años de edad, quien resultó herido el jueves en la
noche en El Junco, municipio Cárdenas, de Táchira, cuando protestaba
contra la habilitación de un centro electoral en una escuela de esa
zona. Javier Tarazona, presidente del Colegio de Profesores del Táchira,
señaló que el hombre era teniente coronel retirado de la GNB y que fue
impactado por un tiro de fusil en la ingle. “Estaban exigiéndole al Plan
República que retiraran el protocolo de las elecciones del domingo y lo
que recibieron fueron disparos de FAL como si estuvieran enfrentando a
personas que estaban invadiendo el territorio venezolano. Hoy Vielma
Mora apunta una víctima más en su cuenta”, dijo Tarazona. En el hecho
fueron heridas ocho personas. Tarazona señaló que fueron llevados a un
centro de salud y al sitio llegaron funcionarios Servicio Bolivariano de
Inteligencia. “Así no atacan a la guerrilla, ni a los grupos
irregulares. Decidimos protestar y nos negamos a que nos quiten la
libertad”, señaló Tarazona. Los familiares de los heridos también fueron
agredidos por los funcionarios de seguridad. Al cierre de esta edición
el Ministerio Público no había asignado un fiscal ni lo contaba en su
registro.
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