Representantes del sector privado y del
movimiento sindical independiente coincidieron en exigir al Ejecutivo
instrumentar políticas que controlen la inflación en lugar de imponer
unilateralmente aumentos de salarios y bono de alimentación que reavivan
la espiral del incremento desmesurado del costo de la vida. “El
gobierno debe aplicar los ajustes macroeconómicos como el abordaje de la
inflación”, manifestó Francisco Martínez, presidente de Fedecámaras.
Alertó que las empresas medianas y
pequeñas son las más golpeadas con los ajustes del sueldo integral
debido al incremento de los costos laborales como consecuencia de la
decisión oficial, lo que ocasionará la reducción de las nóminas o el
cierre de empresas con la consiguiente pérdida de empleos.
“Es una conducta irresponsable que el
gobierno celebre un aumento de salarios sin asumir la inflación ni los
correctivos para detenerla”, sentenció Martínez.
El domingo, el presidente Nicolás
Maduro anunció un alza del salario mínimo de 50% a partir del primero de
julio con lo quedará en 97.531 bolívares mensuales, mientras que el
bono de alimentación pasó de 135.000 a 153.000 bolívares al mes.
Para los pensionados del Seguro
Social, además de la homologación de la pensión con el salario mínimo,
se subió el bono a 29.258 bolívares mensuales.
Maryolga Girán, presidente de la
Comisión Laboral de Conindustria, destacó que nuevamente el gobierno
incurre en el error de una medida populista, esta vez buscando el apoyo a
la constituyente, que ocasionará un mayor desempleo y el cierre de
empresas.
Girán indicó que el sector más
afectado es el comercio y la pequeña y mediana industria porque su
personal gana salario mínimo a diferencia de la gran industria que paga a
sus trabajadores por encima del sueldo mínimo.
Froilán Barrios, coordinador del
Frente Autónomo de Defensa del Empleo, el Salario y el Sindicato,
(Fadess) aclaró que los 250.531 bolívares mensuales reunidos en las
alzas del salario mínimo y el ticket de alimentación “no son un sueldo
integral como el gobierno de Nicolás Maduro quiere hacer ver, además de
que no cubren el costo de la cesta alimentaria y mucho menos la básica”.
Según el último reporte del Centro de
Documentación y Análisis de la Asociación Venezolana de Maestros,
(Cendas) el precio de las canastas de alimentos y básica se ubicó en
mayo pasado en 990.918,92 y 1.426.363,92 bolívares, respectivamente.
Barrios explicó que en el ingreso
mensual fijado por el Ejecutivo sigue predominando el bono alimenticio,
lo cual evidencia la intención gubernamental de “flexibilizar el salario
dentro del paquete neoliberal y de capitalismo más salvaje que se haya
aplicado en América Latina”. Recalcó que es urgente parar la inflación
calculada en 1.300% durante 2017 para detener la pérdida constante del
poder adquisitivo.
Considera que “la única defensa
actual que tendría el salario del trabajador es dolarizarlo porque todos
los productos y bienes se compran al precio del dólar en el mercado
paralelo”. Agregó que el incremento de 50.000 bolívares al mes en el
ingreso equivalente a 1.666 bolívares diarios, no alcanza para comprar
una empanada o un café.
José Antonio García, dirigente de la
Unión Nacional de Trabajadores, insistió en que el gobierno debe adoptar
una política antiinflacionaria a través de la reactivación del aparato
productivo agrario y fabril y del sector construcción con la finalidad
de crear empleo decente con salario digno para que los trabajadores
recuperen el poder de compra.
La Unete propone un cambio
estructural en las políticas laborales, lo cual pasa por fijar los
salarios sectoriales simultáneamente con los ajustes de los precios de
los alimentos y los bienes. “Para ello, se debe instalar una comisión
tripartita integrada por el Estado, los patronos y los trabajadores y
acabar así con la práctica gubernamental de fijar de manera unilateral e
inconsulta los aumentos salariales”, dijo García.
Agregó que el gobierno todavía debe a
los trabajadores de las gobernaciones y las alcaldías los aumentos de
salario y ticket que entraron en vigencia a partir del 1º de mayo
pasado. Ambos sindicalistas denunciaron que con la medida de salario
integral, Maduro busca comprar conciencias para la asamblea nacional
constituyente.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.