Foto: José Félix Lara
Luis Ponce
Adquirir un equipo telefónico es cada vez más difícil. Un “perolito”, de esos de “baja gama”, tiene un costo aproximado de Bs 2 millones 140 mil; mientras que uno de nueva generación, como el Samsung J7, se cotiza en Bs 53 millones.
Para el primero se necesitan unos tres salarios mínimo integral, ubicado en Bs 797.510, y para el último más de 66, lo que serían cinco años y medio de trabajo.
Alfonso Córdobas, encargado de una tienda
tecnológica ubicada en el Centro Comercial Multiplaza Paraíso, está
claro que el costo es demasiado alto “para mí que soy vendedor. La
prioridad de la persona es la comida, no un teléfono”.
Por su parte, Maikel Rodríguez dijo “uno tiene que
reunir entre Bs 7 millones y 8 millones para adquirir un celular. Los
teléfonos van a seguir subiendo. Ahorita no tengo teléfono porque me lo
robaron en el metro. Prefiero tener comida en mi casa que andar con un
teléfono caro”.
Karla Ramírez, de 26 años, es encargada de una tienda en el
Multiplaza, expresa que desde hace unos meses no tiene teléfonos
celulares, y que ha tenido que salir a flote con los accesorios de los
móviles. El forro de celular más económico que tiene cuesta 450 mil
bolívares, un cargador se cotiza entre 500 y 600 mil bolívares y un
vidrio templado en 350 a 400 mil, dependiendo del modelo de celular.
En el Centro Tecnológico de Caracas, City Market,
Aarón Patiño cuenta en su tienda se consiguen teléfonos gama media en 15
millones como el “BLU”, y los gama alta como los Samsung a partir de 23
millones. Sin embargo, asegura que en lo que va de año ha realizado
varias ventas -entre 10 a 12 equipos-. “No hay variedad en equipos.
Existe mucha diferencia de precio entre este año y años anteriores. Una
memoria de teléfono puede costar hasta un millón”, atinó Patiño.
“Ni siquiera se había culminado el año cuando las ventas ya estaban
pésimas. Hubo más ventas en noviembre que en diciembre. Nosotros nos
manejamos por el dólar y aun cuando lo calculamos por debajo de la
página un equipo es muy costoso. Lamentablemente hay que vender en base
al dólar paralelo”, expresó María Fernández.
En el Sambil, Rodolfo Rincones dijo “años “los
teléfonos están carísimos. Mi esposa está cumpliendo año y quería
regalarle uno pero es muy costoso. Desde hace dos años no compraba
celular. El último Samsung que adquirí lo compre en 100 mil bolívares”.
Reparar un teléfono ha sido la opción para muchos. Incluso, en las
tiendas hacen cola para entrar. Algunas cobran menos del 10% de lo que
cuesta el equipo. Los costos varían, depende si se le compra o no
repuesto al aparato. |
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