Hillary Clinton hablará este viernes, en la Universidad Internacional de la Florida, sobre las nuevas políticas del gobierno de Barack Obama hacia Cuba. Jim Cole AP
Hillary Clinton hablará este viernes, en la Universidad Internacional de la Florida, sobre las nuevas políticas del gobierno de Barack Obama hacia Cuba. Jim Cole AP
David Lightman
WASHINGTON
Donald Trump pudiera provocar en las elecciones presidenciales del 2016 exactamente lo mismo que Ross Perot hizo hace una generación, cuando Bill Clinton se alejó de Bush padre y un magnate de los negocios recibió una enorme cantidad de votos.
Una nueva encuesta McClatchy-Marist concluye que Hillary Clinton lidera a todos los rivales republicanos en potencia. Y aunque su ventaja se ha estrechado en relación con varios, ha aumentado significativamente en una hipotética carrera contra Jeb Bush, si Trump decide incorporarse al ruedo como candidato de un tercer partido, como ha sugerido que es posible.
La encuestra proyecta una réplica virtual de 1992. Ese año, Bill Clinton ganó la Casa Blaca con 43 por ciento del voto popular. El presidente George H.W. Bush, el padre de Jeb Bush, quedó en segundo lugar con 37.5 percent. Y Ross Perot, que se postuló como independiente, recibió 19 por ciento.
Esta vez, Hillary Clinton tiene 44 por ciento, Jeb Bush 29 y Trump 20, según la encuesta.
Los resultados de la encuesta se conocen en momentos que los republicanos se preparan para su primer debate, a realizarse el jueves en Cleveland, y en este momento Trump lidera las encuestas nacionales entre los electores republicanos. Si no llegara a concretar la nominación republicana, algo que esperan los expertos del partido, Trump ha abierto la puerta a una postulación por un tercer partido.
En ese caso, Trump afectaría seriamente las posibilidades de Bush, según una encuesta nacional de McClatchy-Marist realizada del 22 al 28 de julio.
Así las cosas, Trump se llevaría muchos votos de republicanos e independientes, pero no de demócratas. Recibiría el 28 por ciento del voto republicano, mientras que Bush se hundiría a 63 por ciento del apoyo de su propio partido, mientras que Clinton ganaría el 86 por ciento de los votos demócratas.
Los que respaldan a Trump elogian su sinceridad y lo califican de una alternativa positiva a los políticos veteranos.
“Todos los demás llevan tiempo en la política. Trump no”, dijo John Hyleman, de Gastonia, Carolina del Norete. “Trump le dice a todos que si no concuerdan con él, se pueden ir al diablo, y eso me gusta”.
Trump también prueba ser una figura polarizante.
“No creo que deba estar en al carrera porque es un racista”, dijo John Hogan, de Sherman, Texas, quien todavía no ha tomado partido por ningún candidado. Trump ha criticado a los inmigrantes indocumentados mexicanos, calificándolos de violadores y delincuentes.
Sin Trump en las elecciones generales, Bush acapararía a más de nueve de cada 10 repubublicanos y Clinton lo superaría por 6 puntos porcentuales.
Una candidatura de Trump a las elecciones presidenciles sería un enorme impulso para Clinton, cuyo apoyo ha perdido alguna fuerza en meses recientes, cuando ha tenido que defender su uso de correos electrónicos privados cuando era secretaria de Estado y ha sido criticada por un estilo de campaña demasiado rígido.
“Esto sugiere que será una elección muy competitiva”, dijo Lee Miringoff, director del Instituto Marista de Opinión Pública, que realizó la encuesta.
Esta es la proyección de cómo lo iría a Clinton contra todos los candidatos republicanos:
– Supera al senador Rand Paul, de Kentucky, por 5 puntos porcentuales, 48 a 43 por ciento.
– Supera al senador Marco Rubio, de Florida, por 5 puntos porcentuales, 47 a 42 por ciento.
– Supera a Bush por 6 puntos porcentuales, 49 a 43 por ciento.
– Supera al gobernador Scott Walker, de Wisconsin, por 7 puntos porcentuales, 48 a 41 por ciento.
– Supera a Rick Perry, ex gobernador de Texas, por 7 puntos porcentuales, 47 a 40 por ciento.
– Supera al senador Ted Cruz, de Texas, por 9 puntos porcentuales, 49 a 40 por ciento.
– Supera a Mike Hucakabee, ex gobernador de Arkansas, por 9 puntos porcentuales, 50 a 41 por ciento.
– Supera al neurocirujano retirado Ben Carson por 10 puntos porcentuales, 49 a 39 por ciento.
– Supera al gobernador Chris Christie, de Nueva Jersey, por 10 puntos porcentuales, 50 a 40 por ciento.
– Supera al gobernador ohn Kasich, de Ohio, por 10 puntos porcentuales, 49 a 39 por ciento.
– Supera Rick Santorum, ex senador por Pennsylvania, por 12 puntos porcentuales, 51 a 39 por ciento.
– Supera a George Pataki, ex gobernador de Nueva York, por 13 puntos porcentuales, 50 a 37 por ciento.
– Supera al gobernador Bobby Jindal, de Louisiana, por 16 puntos porcentuales, 52 a 36 por ciento.
– Supera a Trump por 16 puntos porcentuales, 54 a 38 por ciento.
– Supera al senador Lindsey Graham, de Carolina del Sur, of South Carolina by 17, 52 to 35.
– Supera a la ex ejecutiva empresarial Carly Fiorina por 18 puntos porcentuales, 53 a 35 por ciento.
– Supera a Jim Gilmore, ex gobernador de Virginia, por 21 puntos porcentuales, 53 a 32 por ciento.
Clinton ha bajado ligeramente de 50 por ciento contra los principales contendientes republicanos. Combinado esto con los mágenes más pequeños, el retroceso es significativo porque Clinton es una figura harto conocida, mientras que la mayoría de los retadores no lo son.
Una nueva encuesta McClatchy-Marist concluye que Hillary Clinton lidera a todos los rivales republicanos en potencia. Y aunque su ventaja se ha estrechado en relación con varios, ha aumentado significativamente en una hipotética carrera contra Jeb Bush, si Trump decide incorporarse al ruedo como candidato de un tercer partido, como ha sugerido que es posible.
La encuestra proyecta una réplica virtual de 1992. Ese año, Bill Clinton ganó la Casa Blaca con 43 por ciento del voto popular. El presidente George H.W. Bush, el padre de Jeb Bush, quedó en segundo lugar con 37.5 percent. Y Ross Perot, que se postuló como independiente, recibió 19 por ciento.
Esta vez, Hillary Clinton tiene 44 por ciento, Jeb Bush 29 y Trump 20, según la encuesta.
En ese caso, Trump afectaría seriamente las posibilidades de Bush, según una encuesta nacional de McClatchy-Marist realizada del 22 al 28 de julio.
Así las cosas, Trump se llevaría muchos votos de republicanos e independientes, pero no de demócratas. Recibiría el 28 por ciento del voto republicano, mientras que Bush se hundiría a 63 por ciento del apoyo de su propio partido, mientras que Clinton ganaría el 86 por ciento de los votos demócratas.
“Todos los demás llevan tiempo en la política. Trump no”, dijo John Hyleman, de Gastonia, Carolina del Norete. “Trump le dice a todos que si no concuerdan con él, se pueden ir al diablo, y eso me gusta”.
Trump también prueba ser una figura polarizante.
“No creo que deba estar en al carrera porque es un racista”, dijo John Hogan, de Sherman, Texas, quien todavía no ha tomado partido por ningún candidado. Trump ha criticado a los inmigrantes indocumentados mexicanos, calificándolos de violadores y delincuentes.
Una candidatura de Trump a las elecciones presidenciles sería un enorme impulso para Clinton, cuyo apoyo ha perdido alguna fuerza en meses recientes, cuando ha tenido que defender su uso de correos electrónicos privados cuando era secretaria de Estado y ha sido criticada por un estilo de campaña demasiado rígido.
“Esto sugiere que será una elección muy competitiva”, dijo Lee Miringoff, director del Instituto Marista de Opinión Pública, que realizó la encuesta.
Esta es la proyección de cómo lo iría a Clinton contra todos los candidatos republicanos:
– Supera al senador Rand Paul, de Kentucky, por 5 puntos porcentuales, 48 a 43 por ciento.
– Supera al senador Marco Rubio, de Florida, por 5 puntos porcentuales, 47 a 42 por ciento.
– Supera a Bush por 6 puntos porcentuales, 49 a 43 por ciento.
– Supera al gobernador Scott Walker, de Wisconsin, por 7 puntos porcentuales, 48 a 41 por ciento.
– Supera a Rick Perry, ex gobernador de Texas, por 7 puntos porcentuales, 47 a 40 por ciento.
– Supera al senador Ted Cruz, de Texas, por 9 puntos porcentuales, 49 a 40 por ciento.
– Supera a Mike Hucakabee, ex gobernador de Arkansas, por 9 puntos porcentuales, 50 a 41 por ciento.
– Supera al neurocirujano retirado Ben Carson por 10 puntos porcentuales, 49 a 39 por ciento.
– Supera al gobernador Chris Christie, de Nueva Jersey, por 10 puntos porcentuales, 50 a 40 por ciento.
– Supera al gobernador ohn Kasich, de Ohio, por 10 puntos porcentuales, 49 a 39 por ciento.
– Supera Rick Santorum, ex senador por Pennsylvania, por 12 puntos porcentuales, 51 a 39 por ciento.
– Supera a George Pataki, ex gobernador de Nueva York, por 13 puntos porcentuales, 50 a 37 por ciento.
– Supera al gobernador Bobby Jindal, de Louisiana, por 16 puntos porcentuales, 52 a 36 por ciento.
– Supera a Trump por 16 puntos porcentuales, 54 a 38 por ciento.
– Supera al senador Lindsey Graham, de Carolina del Sur, of South Carolina by 17, 52 to 35.
– Supera a la ex ejecutiva empresarial Carly Fiorina por 18 puntos porcentuales, 53 a 35 por ciento.
– Supera a Jim Gilmore, ex gobernador de Virginia, por 21 puntos porcentuales, 53 a 32 por ciento.
Clinton ha bajado ligeramente de 50 por ciento contra los principales contendientes republicanos. Combinado esto con los mágenes más pequeños, el retroceso es significativo porque Clinton es una figura harto conocida, mientras que la mayoría de los retadores no lo son.
