Las condiciones impuestas por el Consejo
Nacional Electoral para la renovación de los partidos son incumplibles,
advirtió el cardenal Jorge Urosa, arzobispo de Caracas. “La renovación
de los partidos no puede hacerse en 2 días y con solo 390 máquinas. Los
partidos deben presionar para que el CNE establezca las condiciones
idóneas para la celebración del proceso. Los partidos deben hacer valer
ante el CNE su derecho constitucional de existir”, señaló.
Urosa añadió que si el CNE cancela a
los partidos que no logren renovarse incurriría en una práctica
absolutamente dictatorial que podría tener consecuencias terribles para
la vida de la nación. Esta conducta generaría un rechazo total por parte
del pueblo al gobierno.
El prelado agregó que no puede
admitirse la violación de derechos constitucionales. Insistió en que el
ente comicial no tiene derecho para impedirle a los partidos su
funcionamiento y al pueblo venezolano su derecho al voto. Esta situación
debe resolverse en favor a la participación del pueblo y la conducción
de los destinos del país.
El cardenal indicó que el Poder
Electoral al no convocar las elecciones regionales, por omisión “bloquea
el derecho constitucional al voto”. Exhortó al organismo a honrar los
comicios, que debieron realizarse en 2016, y a ir organizando las
elecciones municipales que corresponden este año en las que se escogerán
a alcaldes y concejales. En ambos procesos deben escogerse más de 3.000
cargos de elección popular.
Urosa, que ayer celebró una
eucaristía para la Federación de Asociaciones de Jubilados de Venezuela
en la iglesia La Chiquinquirá, manifestó preocupación por la realidad
que vive el país. “La situación se agrava cada día desde el punto de
vista económico y social, la criminalidad es cada vez más alta, hay un
problema de delincuencia, de inseguridad y de alto costo de la vida.
Sigue la angustia del pueblo, a quien se le está haciendo un daño
terrible, especialmente a los más pobres”, afirmó.
Consideró que el incremento del
ticket alimentación no solventa la situación del país. En su opinión:
“Debería darse una política de incentivo y promoción de la producción
agrícola y pecuaria para poder resolver el problema económico”.
Diálogo. El cardenal
Urosa señaló que no ha hablado recientemente con monseñor Claudio María
Celli, que fue representante del Vaticano en la mesa de diálogo entre
el gobierno y la oposición, pero refirió que no puede retomarse el
proceso sin el cumplimiento de los acuerdos suscritos entre las partes
el año pasado.
“El nuncio apostólico, monseñor Aldo
Giordano, está dispuesto al diálogo, pero quienes tienen que hacerlo son
las partes. Mientras no se cumpla con los requisitos de la oposición,
de una ruta electoral ni se realicen las elecciones pendientes que
fueron anunciadas en octubre del 2016, evidentemente no podrá hacerse
ningún dialogo”, subrayó.
El también arzobispo de Caracas
manifestó su preocupación por las denuncias sobre el aumento del número
de presos políticos en el país. “La existencia de presos políticos es un
indicio de que este no es un gobierno democrático. Un gobierno
democrático no tiene presos políticos ni de conciencia, esto es signo de
que estamos en un gobierno dictatorial”, puntualizó.
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