La dirigente opositora María Corina Machado afirmó ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas que en Venezuela no existe la justicia. Así quedó evidenciado, afirmó, en el último informe de la Misión Independiente para la Determinación de los Hechos, en el que se denunció la falta de independencia judicial en Venezuela.
“En Venezuela no hay justicia, no hay respeto a la ley. El régimen chavista-madurista se propuso, como todo sistema totalitario, someter la justicia. La justicia no existe para defender al ciudadano sino para oprimirlo, para hacer intocable al régimen y sus corruptos, para imponer el terror”, manifestó Machado en un mensaje pregrabado.
Afirmó que los administradores de la justicia son quienes tienen más miedo.
“Jueces, fiscales, funcionarios. Y lo sé porque me lo dicen. Una actuación independiente conforme a la ley es considerada una traición a la tiranía, y son ellos entonces tanto instrumento de la represión como rehenes del sistema”, expresó.
La coordinadora de Vente Venezuela dijo que el informe sobre Venezuela demuestra los horrores que se cometen contra civiles y militares y que no habrá justicia mientras Nicolás Maduro continúe en el poder. Pidió además a la Corte Penal Internacional avanzar en la investigación por los crímenes de lesa humanidad cometidos en el país.
“Es inadmisible que engañosas negociaciones pretendan obstruir este proceso. Mi reconocimiento a los defensores de derechos humanos, a los familiares de las víctimas y a las víctimas por su coraje y dignidad. En Venezuela habrá justicia y la verdad no podrá borrarse. Mi reconocimiento a ellos, que no aceptarán jamás que la justicia se negocie”, finalizó.
La Misión Independiente para la Determinación de los Hechos sobre Venezuela concluyó, en un informe presentado el 16 de septiembre, que los jueces y fiscales han tenido un papel muy importante en graves violaciones de derechos humanos contra opositores al gobierno de Nicolás Maduro.
“Las deficiencias del sistema de justicia han ido de la mano de un patrón de graves violaciones de derechos humanos y crímenes de derecho internacional en el contexto de una política de Estado para silenciar, desalentar y sofocar a la oposición al gobierno desde 2014”, señaló.
“En medio de la profunda crisis de derechos humanos de Venezuela, la independencia del poder judicial se ha visto profundamente erosionada. Eso ha puesto en peligro su función de impartir justicia y salvaguardar los derechos individuales”, aseguró la presidenta de la misión Marta Valiñas.
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