* Brasil hace llamado revisión financiera mundial
* Obama insta estadounidenses a trabajar juntos en crisis
* Presidente FMI solicita medidas monetarias y fiscales
Por Louise Egan y Deborah Charles
SAO PAULO/CHICAGO (Reuters) - El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, pidió el sábado una revisión general del sistema financiero mundial que "se derrumbó como un castillo de naipes" tras la crisis crediticia, y solicitó una mayor participación de los países con economías emergentes.
En tanto, el presidente electo Barack Obama dijo que es tiempo de que los estadounidenses dejen a un lado sus diferencias políticas para enfocarse en impedir una profunda recesión, que él enfrentará apenas llegue a la Casa Blanca en enero.
Los ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales se encontraron el sábado en el centro económico brasileño de Sao Paulo para buscar formas de encarar la crisis financiera mundial.
El presidente del Fondo Monetario Internacional (FMI) señaló que los líderes deben encontrar caminos para estimular sus economías, incluidos nuevos recortes de tasas de interés.
Lula, un ex líder sindical, advirtió que millones de personas se arriesgan a perder sus trabajos, generando un incremento de la pobreza en muchas economías emergentes.
"Esta crisis se inició en las economías avanzadas", dijo Lula a los funcionarios de Finanzas. "Esto es la consecuencia de la creencia ciega en la habilidad autoregulatoria de los mercados y, en importante grado, a la falta de control de los protagonistas financieros", agregó.
El viernes, las naciones "BRIC" de Brasil, Rusia, India y China, por primera vez adoptaron una postura común que llama por reformas de instituciones como el FMI que reflejen la creciente importancia de las economías en desarrollo.
Países como el gigante exportador China y los estados ricos en petróleo del Golfo Pérsico han acumulado miles de millones de dólares en reservas que pueden ayudar al FMI a apoyar a que pequeños países soporten la inestabilidad que ha sacudido a los mercados financieros y sus monedas.
Lula, crítico durante largo tiempo de la predominancia de Estados Unidos y de otros países desarrollados en la forma en que se toman las decisiones sobre las finanzas mundiales, dijo que existe una alta aceptación de que los países del G7 ya no son capaces de trabajar aislados.
"Es el momento para realizar un pacto entre los gobiernos para crear una nueva arquitectura financiera para el mundo", destacó.
Brasil organiza una reunión anual de funcionarios de Finanzas del Grupo de los 20 países de las economías más avanzadas y en desarrollo.
Intentan prepararse para una cumbre de emergencia de líderes mundiales del G20 que tendrá lugar el próximo fin de semana en Washington.
El presidente del Banco Central de Argentina dijo que el G20 está cerca del consenso sobre la necesidad de aumentar la influencia de la entidad.
Sin embargo, las posibilidades de que afloren pronto planes detallados son escasas, dado que la administración del saliente presidente George W. Bush ha desestimado la necesidad de grandes reformas.
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Henry Paulson, al igual que muchos ministros de Finanzas europeos, no asistió a las reuniones en Sao Paulo.
ASUMIR TAREAS RAPIDO
Por su parte Obama, quien habló en un discurso semanal por radio, dijo que es vital que los estadounidenses dejen a un lado las divisiones de la reciente campaña electoral "y eso es particularmente importante en un momento en que enfrentamos los desafíos más relevantes de nuestras vidas".
El presidente electo dijo que no perderá tiempo para enfrentar la crisis.
"Aunque debemos reconocer que sólo tenemos un presidente por vez y que el presidente Bush es el líder de nuestro Gobierno, quiero asegurar que asumiremos las tareas rápidamente el 20 de enero, porque no hay un momento que perder".
No se aclaró si Obama asistiría a la cumbre de los líderes del G20 en Washington.
Algunos líderes europeos dijeron que la cumbre ofrece una oportunidad de fijar los cimientos para grandes cambios en la manera en que se administra el sistema financiero, para futuras reuniones a inicios del próximo año.
El presidente francés Nicolas Sarkozy dijo el viernes que Europa respaldó ideas inspiradas en Francia, como un rol más importante para el FMI, vigilancia de agencias calificadoras de créditos y límites en la toma excesiva de riesgos.
El ministro de Finanzas canadiense, Jim Flaherty, prevé que los jefes de bancos centrales -incluidos Ben Bernanke, de la Reserva Federal, y Jean-Claude Trichet, del Banco Central Europeo, continúen las discusiones de acción conjunta para rebajar más las tasas de interés.
La Casa Blanca dijo el sábado que hay concordancias con los líderes europeos en la necesidad de ejecutar acciones rápidamente, pero no dio detalles al respecto.
El jefe del FMI dijo que los líderes que se reunirán en Washington deberían tener nuevas ideas para impulsar sus economías mediante medidas monetarias y fiscales, y para asegurar que la entidad posee suficiente financiamiento para ayudar a los países a sobrevivir a la inestabilidad.
"Hay ámbito para la expansión fiscal en muchos economías de mercados avanzados y en algunos emergentes; y con el declive de la inflación, algunos bancos centrales tienen espacio para más alivio monetario", dijo el director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, en una carta dirigida a los jefes de gobierno del
G20.
* Obama insta estadounidenses a trabajar juntos en crisis
* Presidente FMI solicita medidas monetarias y fiscales
Por Louise Egan y Deborah Charles
SAO PAULO/CHICAGO (Reuters) - El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, pidió el sábado una revisión general del sistema financiero mundial que "se derrumbó como un castillo de naipes" tras la crisis crediticia, y solicitó una mayor participación de los países con economías emergentes.
En tanto, el presidente electo Barack Obama dijo que es tiempo de que los estadounidenses dejen a un lado sus diferencias políticas para enfocarse en impedir una profunda recesión, que él enfrentará apenas llegue a la Casa Blanca en enero.
Los ministros de Finanzas y gobernadores de bancos centrales se encontraron el sábado en el centro económico brasileño de Sao Paulo para buscar formas de encarar la crisis financiera mundial.
El presidente del Fondo Monetario Internacional (FMI) señaló que los líderes deben encontrar caminos para estimular sus economías, incluidos nuevos recortes de tasas de interés.
Lula, un ex líder sindical, advirtió que millones de personas se arriesgan a perder sus trabajos, generando un incremento de la pobreza en muchas economías emergentes.
"Esta crisis se inició en las economías avanzadas", dijo Lula a los funcionarios de Finanzas. "Esto es la consecuencia de la creencia ciega en la habilidad autoregulatoria de los mercados y, en importante grado, a la falta de control de los protagonistas financieros", agregó.
El viernes, las naciones "BRIC" de Brasil, Rusia, India y China, por primera vez adoptaron una postura común que llama por reformas de instituciones como el FMI que reflejen la creciente importancia de las economías en desarrollo.
Países como el gigante exportador China y los estados ricos en petróleo del Golfo Pérsico han acumulado miles de millones de dólares en reservas que pueden ayudar al FMI a apoyar a que pequeños países soporten la inestabilidad que ha sacudido a los mercados financieros y sus monedas.
Lula, crítico durante largo tiempo de la predominancia de Estados Unidos y de otros países desarrollados en la forma en que se toman las decisiones sobre las finanzas mundiales, dijo que existe una alta aceptación de que los países del G7 ya no son capaces de trabajar aislados.
"Es el momento para realizar un pacto entre los gobiernos para crear una nueva arquitectura financiera para el mundo", destacó.
Brasil organiza una reunión anual de funcionarios de Finanzas del Grupo de los 20 países de las economías más avanzadas y en desarrollo.
Intentan prepararse para una cumbre de emergencia de líderes mundiales del G20 que tendrá lugar el próximo fin de semana en Washington.
El presidente del Banco Central de Argentina dijo que el G20 está cerca del consenso sobre la necesidad de aumentar la influencia de la entidad.
Sin embargo, las posibilidades de que afloren pronto planes detallados son escasas, dado que la administración del saliente presidente George W. Bush ha desestimado la necesidad de grandes reformas.
El secretario del Tesoro de Estados Unidos, Henry Paulson, al igual que muchos ministros de Finanzas europeos, no asistió a las reuniones en Sao Paulo.
ASUMIR TAREAS RAPIDO
Por su parte Obama, quien habló en un discurso semanal por radio, dijo que es vital que los estadounidenses dejen a un lado las divisiones de la reciente campaña electoral "y eso es particularmente importante en un momento en que enfrentamos los desafíos más relevantes de nuestras vidas".
El presidente electo dijo que no perderá tiempo para enfrentar la crisis.
"Aunque debemos reconocer que sólo tenemos un presidente por vez y que el presidente Bush es el líder de nuestro Gobierno, quiero asegurar que asumiremos las tareas rápidamente el 20 de enero, porque no hay un momento que perder".
No se aclaró si Obama asistiría a la cumbre de los líderes del G20 en Washington.
Algunos líderes europeos dijeron que la cumbre ofrece una oportunidad de fijar los cimientos para grandes cambios en la manera en que se administra el sistema financiero, para futuras reuniones a inicios del próximo año.
El presidente francés Nicolas Sarkozy dijo el viernes que Europa respaldó ideas inspiradas en Francia, como un rol más importante para el FMI, vigilancia de agencias calificadoras de créditos y límites en la toma excesiva de riesgos.
El ministro de Finanzas canadiense, Jim Flaherty, prevé que los jefes de bancos centrales -incluidos Ben Bernanke, de la Reserva Federal, y Jean-Claude Trichet, del Banco Central Europeo, continúen las discusiones de acción conjunta para rebajar más las tasas de interés.
La Casa Blanca dijo el sábado que hay concordancias con los líderes europeos en la necesidad de ejecutar acciones rápidamente, pero no dio detalles al respecto.
El jefe del FMI dijo que los líderes que se reunirán en Washington deberían tener nuevas ideas para impulsar sus economías mediante medidas monetarias y fiscales, y para asegurar que la entidad posee suficiente financiamiento para ayudar a los países a sobrevivir a la inestabilidad.
"Hay ámbito para la expansión fiscal en muchos economías de mercados avanzados y en algunos emergentes; y con el declive de la inflación, algunos bancos centrales tienen espacio para más alivio monetario", dijo el director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn, en una carta dirigida a los jefes de gobierno del
G20.
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